Caso clínico Mª Carmen, paciente que sufre una mielopatía.

En el caso de Mª Carmen Longui se trata la mielopatía, una lesión de la médula espinal, con fisioterapia neurológica.

La fisioterapia neurológica

Dentro de la fisioterapia encontramos la especialidad de fisioterapia neurológica. Los fisioterapeutas que nos dedicamos a esta rama nos encargamos del tratamiento de los pacientes con patologías neurológicas. Como es el caso de nuestra paciente Mª Carmen. La fisioterapia neurológica, aborda la parte más física de los problemas que padecen estos pacientes. Nuestra función se resumen en dos aspectos fundamentales:

  • Dar solución a las secuelas de las enfermedades neurológicas.
  • Dar solución a las dolencias con las que estos pacientes conviven.

En resumen, la fisioterapia neurológica, tiene como objetivo final aumentar potencialmente la calidad de vida de las personas que sufren este tipo de patologías, trabajando sobre los síntomas propios de cada afección, mejorando todo lo posible la capacidad de movimiento y, así, la autonomía e independencia en las actividades del día a día.

Tratamiento fisioterápico neurológico

El tratamiento fisioterápico en sí no conlleva ningún riesgo si se usa con coherencia y atendiendo a las necesidades de los pacientes en cada momento o en cada fase de su enfermedad. Cuando hablamos de que puede complicarse la rehabilitación, nos referimos a que pueden surgir algunos cambios inesperados en la sintomatología del paciente (tanto físicos, como cognitivos) que pueden convertirse en un obstáculo para que la rehabilitación avance a la misma velocidad o por el mismo camino. Esto puede retrasar el proceso de recuperación, pero, en estos casos, se tienen que volver a valorar y reconducir los objetivos del tratamiento para adaptarlo a la nueva situación del paciente, para así poder seguir avanzando en la rehabilitación y seguir obteniendo mejoras de forma segura.

Resultados de fisioterapia neurológica en caso clínico de Mª Carmen

En el caso de Mª Carmen, la fisioterapia neurológica ha significado la disminución de los dolores y molestias, además de un mayor control motor. Ahora, puede caminar de nuevo y mantenerse derecha. El planteamiento inicial de su tratamiento fue el manejo del dolor y la mejora de la sintomatología, ya que el dolor puede provocar cambios en la salud física y emocional y, sin el control de éste, sería muy difícil avanzar hacia otros objetivos terapéuticos.

En la primera visita, valoramos a Mª Carmen y conocimos su situación en general. Contamos, también, con su hijo y, entre los dos, nos contaron cómo era su vida durante los últimos meses. Tras la valoración, iniciamos el tratamiento. A partir las 2-3 semanas, a las 5-6 sesiones, empezamos a notar mejorías. Primero, fue un mayor control motor. Esto le ayudó a soportar más los dolores, que pasaron a ser molestias. Además, ya no lo notaba diariamente todo el día, sino que era a ratos y variable según el día.  

Debido al tratamiento fisioterápico que realizó con constancia Mª Carmen, pudo librarse de varias limitaciones que podrían haber derivado de su previa situación de inmovilización:

  • Se hubiera incrementado la posibilidad de tener problemas anímicos y emocionales.
  • La inactividad muscular conlleva a que la musculatura se atrofie y, por tanto, disminuzca la fuer<a, la resistencia, se incrementan los problemas de equilibrio, control motor, etc.
  • Se hubiera imposibilitado la puesta en bipedestación y, por tanto, no hubiera podido caminar.
  • Al no poder moverse, se hubieran podido producir coágulos de sangre, estreñimiento, úlceras por presión, debilidad ósea, muscular, rigidez articular…

Con todo ello, destaca la necesidad de acudir a un profesional que pueda tratar tu caso particular. En este caso en concreto, el tratamiento fisioterapéutico en la paciente ha conllevado a que ésta pueda retomar su independencia y a aumentar su calidad de vida.

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